Hace algunos años un Profesor de mi ciudad publicó un libro con algunas reflexiones que vale la pena rescatar...
1.-
Cuando pasen los años
y uno de aquellos
que me acompañó en el aula,
se me acerque
y me llame Maestro,
recién,quizás,
habré aprobado mi examen
como educador.
2.-
Si soy capaz de reconocer
que me equivoco,
que no lo sé todo,
que soy vulnerable,
más es la grandeza
que verán en mí
mis alumnos.
3.-
Si no indico al Alumno
donde y por qué
se equivocó,
cómo podrá
corregirse?
4.-
Quizás el drama más profundo
que enfrenta
la juventud actual
es la agonía
de sus expectativas,
o simplemente
la ausencia de ellas.
5.-
Si trabajo
solo por lo que me pagan en dinero,
no puedo más que esperar
casi nada por lo que cada día
realizo.
La misión del Educador
no tiene valor
en pesos.
6.-
Ojalá
que cada una de mis clases
sea una buena nueva.
En la novedad de mi mensaje
estará siempre la clave
del éxito de mi desempeño.
7.-
Ley pareja
no es dura.
Que ironía.
Con personas,
más aún con niños,
es la más brutalmente
dura de todas.
Del Libro Algunas Intenciones del Profesor Luis Ramírez Vera(1989)
