Mañana 6 de Agosto commemoramos un nuevo anversario de la bomba en Hiroshima y NAgazaki.Ese día entramos a la oscuridad,bajamos al pozo incierto de la autodesdtrucción.Miles de vidas cegadas por el resplandor atómico,cientos de cadáveres calcinados,miles de niños llorando su dolor.Todo lo que como especie humana pudimos haber llegado a ser,lo destruimos esa mañana,bajo el zumbido terrorífico de la bomba atómica.El ulular de sirenas anunciaba el apocalipsis japonés venido desde las alturas y que convirtió las ciudades en carne quemada,en alaridos desgarradores y en un silencio sepulcral con olor a muerte.Ese día bajamos al abismo más profundo de nuestra degradación como especie y volvimos las cavernas de nuestra evolución,de la cual nos había tomado milenios el poder crecer y desarrollarnos.La sangre,el llanto,el grito,la sirena,la muerte,la angustia,el dolor,la impotencia,el salvajismo...todo presente esa mañana en Japón.Desde aquella mañana la humanidad no se ha vuelto a recuperar...
Mañana 6 de Agosto commemoramos un nuevo anversario de la bomba en Hiroshima y NAgazaki.Ese día entramos a la oscuridad,bajamos al pozo incierto de la autodesdtrucción.Miles de vidas cegadas por el resplandor atómico,cientos de cadáveres calcinados,miles de niños llorando su dolor.Todo lo que como especie humana pudimos haber llegado a ser,lo destruimos esa mañana,bajo el zumbido terrorífico de la bomba atómica.El ulular de sirenas anunciaba el apocalipsis japonés venido desde las alturas y que convirtió las ciudades en carne quemada,en alaridos desgarradores y en un silencio sepulcral con olor a muerte.Ese día bajamos al abismo más profundo de nuestra degradación como especie y volvimos las cavernas de nuestra evolución,de la cual nos había tomado milenios el poder crecer y desarrollarnos.La sangre,el llanto,el grito,la sirena,la muerte,la angustia,el dolor,la impotencia,el salvajismo...todo presente esa mañana en Japón.Desde aquella mañana la humanidad no se ha vuelto a recuperar...
